Se llama belleza interna
lo que George Clooney pretende
y por eso no sorprende
que se arregle la entrepierna.
Una tendencia moderna
de la que yo soy devoto,
y en experiencia piloto
y alarde de cirugía,
con gracia y artesanía,
ya le han planchado el escroto.
Un trabajo delicado,
concienzudo y exigente
del que será conveniente
que no quede en lo privado;
que publique el resultado
por su propia voluntad
y veremos si es verdad,
y así que no cuente trolas,
si son igual que las bolas
del árbol de Navidad.
LdP
1 comentario:
Me he quedado de una pieza,
Don Love: este tío es sato,
gilipollas, mentecato,
no le rige la cabeza;
para la extraña "proeza"
tenido habrá sus razones,
no saquemos conclusiones
hasta haber visto la foto,
mas, si se planchó el escroto…
le dolerán los cojones.
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