miércoles, 4 de enero de 2012

¿AGUA PASADA?

Hay ofensas que no prescriben. Esto parece pensar Antonio, un napolitano de 99 años, que ha decidido divorciarse de su mujer, Rosa de 96 años, tras haber admitido ésta que en 1.940 le fue infiel a su marido en una aventura pasajera. Rosa había guardado durante más de 70 años una carta que ella misma dirigió a su amante y que, por casualidad, llegó a manos de Antonio. El argumento de la mujer de que aquello era "agua pasada" no convenció a su marido que bien pudo despedirse con este soneto.


Nunca de tu actitud nació un recelo
y tardé mucho tiempo en darme cuenta,
pero eso de lucir la cornamenta,
ahora me pesa más, que soy abuelo.


No estoy yo por hacer más el canelo,
que ando ya terminando los noventa,
ni puedo soportar esta tormenta
con la fuerza y las ganas de un mozuelo.


Te recuerdo, mujer, en los cuarenta
cuando te entró tamaña calentura,
y no te vi capaz de tal afrenta,


confiado conviví con tu aventura,
y en tu fragor de vida fraudulenta
me adornó la cabeza un caradura.


LdP

2 comentarios:

Tannhäuser dijo...

Afrentas, burlas, infierno
que sufre el pobre cornudo,
destino cruel, peliagudo,
infamante, sempiterno
llevar en la testa un cuerno
(y aún peor si son dos);
no se qué pensareis vos
pero, a mí no me ha extrañado
que el viejecito burlado
diga a su mujer: ¡adiós!.

Old Nick dijo...

Lo Peor que Pasar Puede
en un Matrimonio Anciano,
es que Descubierto Quede,
Un "Pecado de Verano"...
¡Mira que Hay Que Ser Fulana
y También Mala Persona!
¡Y Tonta y Cretina Insana,
Porque el Tiempo NO PERDONA!
¡Anda y Mal Rayo te Parta!
¡Mira que GUARDAR LA CARTA!

POs Eso Amigo Love. Que Hay Cosas MU GORDAS, Que Ni el Tiempo Puede Perdonar...
¡Menuda Cara que POndr´çia el Abuelete al Enterarse de que llevó Medio Siglo de Corona...
Un Cordial Saludo
y
¡¡RIAU RIAU!!