La poesía satírica siempre ha sido una de mis aficiones. Componerla y compartirla siempre me ha causado satisfacción y felicidad si he arrancado una sonrisa de quien me ha leído. La ironía, el sarcasmo, la sátira son armas de doble filo que pueden fácilmente volverse contra quien las utiliza. También pueden ser motivo de enojo para la persona satirizada. No es esa mi intención. No pretendo que esto vaya más allá que una crítica ácida a veces, pero inofensiva. Pero crítica al fin y al cabo.
Con el rostro compungido, con la mirada perdida, nos anuncias tu salida de donde no te has metido, ¿es deserción o despido, renuncia o acatamiento?, o invadió el destacamento Zapatero: -Pelotón,
desista, cabo Chacón. -Como mande, mi sargento.
3 comentarios:
Es que el robo del coche es un mensaje que le ha llegado a lo mas hondo.
Esta sabe de que son capaces los socialistas.
Licenciada con deshonor?
"Capitán, mande firmes" a casita, nos quedamos por ahora sin presidenta de (la puta)España...
Saludos.
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