¿Recuerdan la entrada del pasado viernes? Pues parece que los chanchullos en las compras por internet no son hechos aislados. Aquí está la prueba.
Mira tú que es mala pata
si encargas cierto aparato
y compruebas de inmediato
que remiten una errata.
-Era una tienda barata-
explicas en tu alegato-,
y no reclamé contrato
por no parecer un rata,
¿por qué me dieron patata
cuando yo pedí boniato?
LdP
La poesía satírica siempre ha sido una de mis aficiones. Componerla y compartirla siempre me ha causado satisfacción y felicidad si he arrancado una sonrisa de quien me ha leído. La ironía, el sarcasmo, la sátira son armas de doble filo que pueden fácilmente volverse contra quien las utiliza. También pueden ser motivo de enojo para la persona satirizada. No es esa mi intención. No pretendo que esto vaya más allá que una crítica ácida a veces, pero inofensiva. Pero crítica al fin y al cabo.
4 comentarios:
La recuerdo D. Love, pero de lo que no tengo ni idea es de lo que ha pasado con las patatas y los boniatos, de eso no me he enterado, aunque por lo que dice en su décima me lo imagino.
No solo en Internet nos dan gato por liebre, no. La vida está llena de sorpresas. Así que a cantar!!!
D. Love: En el último verso dice: "¿...si yo pedí boniato? ¿No quedaría mejor si dijese: ¿...cuando yo pedí boniato?, o ¿...si yo pidiera boniato? Es que parece que queda un poco cojo, ¿no?
Un abrazo.
Don Tann:
Léase la noticia enlazada y verá lo que le pasó a otro fulano que pretendió comprar un móvil por internet.
Doña Joana:
Es verdad, la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, y si hay que cantar se canta. Usted ya sabe que, en mi caso, si hay que tocar, se toca (la guitarra). Especifico.
Don Javier:
Tiene razón como siempre, así que lo corrijo.
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