Lagarta que en la arena se amojama,
cautiva de un calor recalcitrante,
serpiente que se tuesta por delante
y luego por el dorso se sollama.
Sirena que en el bronce se encarama
y que liga en su cuerpo veraneante,
modelo de pecado insinuante
y venus que decora el panorama.
A mí no me apasiona tu delito
pues no me pienso asar como un maldito,
y a esas horas buscadme con certeza
amparado a la sombra, en chiringuito,
con tapas de escabeche y pescaíto
libándome una rubia... de cerveza.
LdP
6 comentarios:
Vaya, vaya, veo que su ausencia de estos días no se ha debido a catarro por el calentamiento global, sino a vacaciones playeras. ¡Los hay con suerte!.
Querido amigo Tannhäuser, mi ausencia no ha sido debida a vacaciones playeras, que éstas ya las disfruto en verano, más bien se ha debido a un viaje a la capital. Ya ve, cuando los madrileños venían a llenar las playas de Cullera y Gandía, yo me cruzaba con ellos por el camino. Pero ya estoy en mi sitio. Un abrazo.
Muy bueno, como siempre. Admiro estas escrituras que haces, y la imaginación que le pones. Genial.
Con rapazas así, no entiendo cómo hay gente que presume de "pluma".
Un abrazo y... aproveché lo de la pluma para hacer un chiste fácil. Ya sé que lo tuyo es el ordenador.
D'ara en davant quan vaja a Cullera, agafaré la càmera i miraré si trobe algun conegut per fer-l una foto i escriure-li un sonet, he,he,he...
¿¿¿Intenciones de cara al verano???
¡¡Temblad guiris!!
El poema, como siempre, ingenioso y divertido. Siempre se sorprende una aquí aunque me siento a salvo porque ya es sabido que la cabra tira al monte.
Un beso D. Love
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